sábado, 9 de febrero de 2008


Poco tenia que ver don Horacio con lo que ocurría entre estas dos bandas…

Este era un hombre trabajador, sumamente pobre pero realmente emprendedor, este día, era uno de los más importantes de su vida pues probablemente, le saldría el trabajo que había anhelado, y así, desapretarse un poco respecto a las deudas, que por cierto, eran muchas

Don Horacio, salió muy esperanzado de su casa, sin saber lo que en realidad acontecería este día, debía llegar temprano, cosa que sucedió, es más, todo salió muy bien y do Horacio salió de allí, con trabajo y con una sonrisa que no podía ocultar

Dos cuadras de haber caminado sosteniendo en sus manos, la llave que lo hacia el nuevo trabajador de la empresa, hubo un problema entre bandas, pero no cualquier problema, habían muchas balas, y gente corriendo, gente que corrió con mas suerte que nuestro protagonista, pues un tiro un poco mas abajo del la costilla izquierda, había acabado con los sueños aparentemente cumplidos de Horacio, que cae, con sus manos en forma de coca, sosteniendo su tesoro anhelado que nunca disfrutaría

En esta imagen se puede ver la desilusión, la impotencia de saber que estuvo tan cerca, pero al fin se le fue arrebatado

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